En el momento que estoy escribiendo, Rivera Elgue sigue siendo el futuro subsecretario de Defensa designado por Lacalle Pou. Le salió el gorila que lleva adentro. Reivindicó el papel de las FF.AA en la dictadura fascista cívico-militar.
Las FF.AA entre 1973-1985 fueron el brazo armado del terrorismo de Estado al servicio de poderosos intereses económicos locales y extranjeros. Iban a hacer los cursos de inteligencia y de torturas a los EE.UU.
Torturaron a miles de uruguayos y uruguayas. Junto con la picana, el tacho y la colgada, les rebajaron el salario real a los trabajadores en un 50%. Aumentó la fuga de capitales y multiplicaron por cinco la deuda externa. Eso de patriota no tiene nada y de artiguista menos. Este gorila justificó el asesinato y desaparición de 196 compatriotas. Porque él lo sabe: la OCOA mataba acá y en la región.
No tuvieron más remedio que criticarlo Lacalle Pou, Álvaro Delgado, Javier Garcia y Guido Manini Ríos. Tendrían que designar a otra persona. Se destituyó antes de ser elegido.
Pero, en cualquier caso, el nuevo subsecretario lo va a designar en la práctica Guido Manini Ríos. Seguro que no va hacer un progresista.
Hay algo que quedó bien claro: no tienen una doctrina para defender nuestra soberanía. Siguen aferrados a la nefasta Doctrina de la Seguridad Nacional. Manini en el fondo piensa igual que Elgue. Pero este se desbocó y mostró las cartas antes de asumir. Tiene los días contados, por nabo. Porque hay gorilas que son nabos.
Tan grave fueron las declaraciones que Guido Manini Ríos tuvo que decir: “el número no es lo principal…acá nunca debieron haber habido desaparecidos.”
Pero salió al ruedo el suegro de Guido, el coronel retirado Roque Moreira, que cuando asesinaron a coronel Ramón Trabal en Paris en diciembre de 1974, revestía como teniente coronel en el batallón de Ingenieros de Combate Nº1. Este personaje dijo: “Me siento más cómodo hablando de gobierno de facto que de dictadura”
Es candidato de Cabildo Abierto a la Intendencia de Artigas por el lema Partido Nacional. Pero el “historiador” y hoy político, cuando habla del 27 de junio de 1973 no dice que fue un golpe de Estado, según él hubo un quiebre institucional, al que no sabe cómo justificar. Me corrijo. Cuando en una entrevista le preguntan por qué su opción por la carrera militar. Contesta que lo hizo porque “quería ser parte de la guerra.”
Resulta que según sus dichos se empezó a preparar para entrar en la Escuela Militar en diciembre de 1972. El enfrentamiento final con los Tupamaros fue entre el 14 de abril y 1º de setiembre de 1972, donde el MLN fue derrotado. Por lo tanto cuando entró a la escuela en febrero de 1973 no había ninguna guerra. El dedo que le falta fue un accidente dando instrucción en 1982 sobre granadas de fragmentación. Ese año ya habían perdido el plebiscito en 1980 y seguían asesinando.
Para Elgue y todos los gorilas: el 29 de enero de 1982 detuvieron, torturaron asesinaron e hicieron desaparecer a Miguel Mato, trabajador de FUNSA y padre de la actual legisladora Verónica Mato.
A Guido Manini Ríos: no es cierto que la “gente común no reaccionó ante eso – se refiere a la dictadura-, lo aceptó como una consecuencia de un proceso anterior.” Se olvida de la heroica huelga general de 15 días contra la dictadura, que realizaron los trabajadores. La dictadura asesinó a dos estudiantes a Ramón Peré y a Walter Medina. A los dos con un tiro por la espalda. Bajo el gobierno del Frente Amplio, la Justicia proceso al asesino de Ramón Peré, el coronel Tranquilino Machado, muy apreciado por los integrantes de la Logia de los Tenientes de Artigas.
Esto fue en julio 1973, cuando usted general se preparaba para la guerra. La guerra contra el pueblo, que perdieron sin tener ninguna baja. La dictadura y su brazo armado fueron derrotados por la lucha pacífica de los orientales. Usted debería saberlo. Si no, ¿qué aprendió en la Universidad Católica?