¡Muy fuerte! Lo dijo el General (R) Guido Manini Ríos este domingo 24 de mayo de 2020 en el programa 7º día.
Fue una entrevista bien planificada y acordada. Yo no sé si para hundirlo o para salvarlo.
El general estaba nervioso. Movía mucho las rodillas, sudaba – menos que cuando hizo su primer discurso en Cabildo Abierto- se le trancó la carretilla varias veces y controlaba que no subiera el tono.
¡Gatopardismo!
Pasó del 14 de abril de 2020 de defender a torturadores y asesinos en pleno Parlamento a esto de ayer domingo.
Indudablemente que mintió de nuevo, porque varias veces dijo que lo que hizo la justicia fue una venganza. Lo volvió a reiterar.
Viene perdiendo credibilidad. Lo tironean de distintos lados y no es tan firme como aparenta. Lo apretaron los fachos que él dice que no existen y salió a defender torturadores en el Poder Legislativo. Lo apretó el Presidente y sale esta entrevista preparada para que mienta y diga que “jamás defendí torturadores, ni la dictadura”.
Lo están disciplinando al general.
Dice que no defendió nunca a la dictadura; pero se preparó para la guerra interna. Guerra que nunca existió. El dedo lo perdió en una clase sobre el uso de las granadas. Todos los desaparecidos, ¡todos! no participaron de ninguna guerra. Los detuvieron, los torturaron, los mataron y los desaparecieron.
El 20 de mayo fue tan gigantesco ya en la previa, que hasta el Partido Nacional, por primera vez, cuelga las imágenes del Toba y de la madre del ministro Heber. Y aclaro para los jóvenes, fueron vilmente asesinados durante la dictadura, pero no son desaparecidos. El Partido Nacional no tiene desaparecidos. El Partido Colorado tampoco y Cabildo Abierto menos. Cabildo Abierto tiene integrantes que torturaron durante la dictadura. Y los partidos tradicionales hicieron una ley para que no fueran presos.
Es un show ver al general con tapaboca en el acto de homenaje al Toba y Zelmar, visiblemente incómodo. Se le nota.
El perfilismo del general en la coalición marrón se va desdibujando porque ya anunció que votará la LUC, incluido el aumento de la represión, el intento disfrazado de reglamentar la huelga y los sindicatos, terminar con la autonomía de la educación pública y privatizar todo los que se pueda. Incluso llegó a reconocer ante la pregunta del periodista que “hay riesgo de abuso policial”, pero que era un mal menor. Se arregla con un buen control, dijo. El que le faltó, sobre una parte de sus subordinados, en Haití.
Que la policía puede contra los narcos – sería una novedad mundial- , que está bien armada y que le hizo algunas recomendaciones a Larrañaga.
Si en abril defendió a torturadores, es defender lo que hizo la dictadura. Por lo tanto en la TV mintió.
Pero además sabemos que en 1980 votó el SI a una constitución fascista, y en 1982 perdió de nuevo porque no votó a los sectores batllistas de los colorados.
Además mantiene la tesis que el golpe de Estado no fue el 27 de junio de 1973. Integra el Parlamento y no sabe lo que pasó en junio de ese año. Dice que la gente no se opuso al gobierno de facto. Por lo tanto según él no hubo resistencia del pueblo oriental contra ese gobierno que el defendió con la bayonetas y en un cuerpo de elite, donde están enterrados varios desaparecidos, que él dice que no se van a encontrar por la operación zanahoria. Y ahí ya aparecieron Julio Castro – asesinado con un tiro en la cabeza- y Ricardo Blanco. Cuando él fue comandante en jefe no apareció ningún desaparecido.
Pero como dijo el general Óscar Pereira: “Los desaparecidos son el gran drama moderno de este país.” El pueblo oriental así lo sigue entendiendo cada 20 de mayo. Esta vez fue tan contundente, a pesar de la pandemia, que hasta los canales que fueron omisos durante años, ahora hicieron una cobertura mejor.
El general ® Manini Ríos recalcó que quiere ir a la justicia y que pidió para que le saquen los fueros. “¡Que no echó para atrás!”
Eso no es así. Hubo un acuerdo. El vota la LUC como quiere el gobierno y a cambio la cámara no llega a los 21 votos para sacarle los fueros. El queda como un “valiente”, pero sigue con los fueros. Es más, tiraron la pelota para después que se vote la LUC.
Yo quedé con ganas que el converso le preguntara sobre la pandemia en Brasil, sobre su amigo Bolsonaro y sobre los contagios en Rivera. Pero no estaba en el guión.