El 16 de marzo de 2023 fueron procesados Ramón Larrosa y Adi Bique Álvarez por “comisión de un delito de homicidio muy especialmente agravado”, entre otros delitos según Procesamiento Nº 320/2023 de la Dra. Isaura Tortora Bof, Juez Ldo Penal de 23º turno.
Sacado del texto del fallo:
B) HECHOS:
“1. Surge acreditado en los presentes obrados que el día 21 de enero de 1976, falleció Ivo Edison Fernández Nieves, nacido en Paysandú, de 42 años de edad, Presidente del Sindicato Único de Trabajadores Marítimos de Paysandú (S.U.T.M.P), en el Batallón de Infantería Nº 8 de esa ciudad. Su muerte acaeció tan solo tres días luego de su detención a raíz de los apremios físicos que le fueron ocasionados.
2. En efecto, el día 18 de enero de 1976, Fernández Nieves fue detenido en su domicilio sito en la calle Juan Zorrilla de San Martín de la ciudad de Paysandú y trasladado al batallón mencionado siendo el Jefe de la Unidad por aquel entonces el teniente Coronel Meirelles (hoy fallecido). Pues bien, una vez en el lugar, fue interrogado por el Alférez Eduardo Craigdallie (hoy fallecido) y por el Oficial S2 de la Unidad el indagado Capitán Ramón Larrosa Santosmauro.
3. Ahora bien, durante el interrogatorio lo sometieron a fuertes apremios físicos, tales como plantones, picana, colgamientos, golpes y submarino estando la víctima encapuchado. Asimismo, no se le proporcionó comida, agua y se le limitó el acceso al baño. A raíz de ello y tras no soportar las agresiones físicas infringidas, se produjo su deceso al tercer día de su detención el 21 de enero de 1976. Posteriormente, su cuerpo fue entregado a sus familiares en un féretro cerrado con orden de no abrirlo, pero los familiares lo abrieron constatando moretones en todo el cuerpo, un corte profundo a la altura del hígado y en la cabeza. Asimismo, antes de su fallecimiento se entregó a su familia ropa de la víctima con manchas de sangre, desgarraduras, orina y materia fecal.
4. El certificado de defunción suscrito por el Dr. Rúben Bulanti Ríos obrante a fs.231 establece que falleció en el Batallón de Infantería Nº 8 a causa de “Sincope neurogénico”.
5. Sin embargo, la Junta Médica conformada por la Cátedra de Medicina Legal y Ciencias Forenses, estableció (f. 937 a 938): “La causa de muerte establecida por el Dr. Bulanti Ríos en el certificado de defunción, tal como fue registrada, es indiscutiblemente errónea… Es tan claro que ni la úlcera duodenal ocasiona esteatosis, como que la esteatosis hepática no es capaz de ocasionar un síncope neurogénico. Tampoco sería verosímil si se tratara de un error en el ordenamiento de las causas, ya que un síncope neurogénico no puede ocasionar esteatosis de hígado, ni esta patología hepática puede ocasionar una úlcera duodenal.” Y continúa consignando el Departamento de Medicina Legal: “2. Se trató de muerte bajo custodia sin recibir la atención médica que requería, en el contexto de los interrogatorios a los que fue sometido es inmediatamente antes de concretarse una nueva sesión ya planificada por el oficial S-2 de la unidad.
3. La muerte sobrevino minutos después de que el oficial S-2 ordenara que se le permitiera descansar y bañarse, luego de estar tres días en prisión.
4. De la descripción de la autopsia y demás datos de autos se puede concluir que la causa directa de la muerte pudo ser tanto un síncope neurogénico como una crisis cetoacidótica.
5. En el terreno biológico conocido del fallecido, ninguna de estas dos posibles causas directas de muerte mencionadas podría ser de aparición espontánea.
6. Tanto en el caso de síncope neurogénico como de una crisis cetósica, la causa básica de muerte pudo ser de privación de alimento, agua, descanso y estrés psicofísico.”
Las negritas son del documento.
En la semana que viene continuaremos con el fallo.
Una aclaración: el Dr. Rubén Bulanti Ríos era mi tío por parte de madre y un fascista confeso que tenía el retrato de Mussolini en su casa. Cómplice de las torturas en el batallón, como queda demostrado en el fallo. Era tan fascista que no le dirigió nunca la palabra a su hijo mayor cuando supo que era de izquierda. Cuando estuve dos años en Paysandú jamás me dirigió la palabra porque sabía cómo pensaba. En algunas familias hay ratas como esa.